Por fin salgo de Donosti! Y encima con planazo bonico-bonico: Este finde me ha invitado Ruben, un amigo que hice por el camino, a pasar el viernes y el sabado con él, en un “campeonato” de longboard que se hace en Salinas. El tema es que Cantabria, Asturias y Euskadi (Bizkaia) compiten por grupos para llevarse a casa el Tableru (un trofeo en madera con forma de longboard).
Más que un campeonato es una excusa para juntarse, comer y entrar un rato al agua. Yo compito a favor de Cantabria, así que me importa aún menos, si cabe, ganar o no. El tema es que he estado surfeando todo el campeonato con un Daniel´s longboard 9´8 gigantesco que me ha dejado Ruben (el mio sigue roto) y la verdad es que es una gran gozada, exceptuando el llevarlo de la caravana al agua y vuelta, que pesa un tonal. El tableru se lo han llevado, como por lo que se ve ya es tradición, los asturianos.
Por lo que a mi respecta, me llevo un buen recuerdo, he probado un par de tablas nuevas, he conocido mucha gente, y por encima de todo, me llevo los hombros cargadisimos y cansancio del bueno de ese que te recuerda el buen día que has tenido. Eso si, este cansancio es mayor que de costumbre… no es una buena señal…
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